Golpe sobre la mesa de George Russell. El piloto británico de Mercedes firmó una clasificación magistral y se llevó la pole position del Gran Premio de Singapur, en una jornada donde todos los pronósticos apuntaban a McLaren y a Max Verstappen. Con un tiempo implacable, Russell superó al neerlandés por 0.182 segundos, mientras que el líder del campeonato, Oscar Piastri, cerró el top 3 a 0.366.
La actuación de Mercedes no fue del todo inesperada. Ya en los Libres 3, las “flechas de plata” habían mostrado un paso adelante en ritmo y equilibrio, aunque pocos imaginaban que podrían arrebatarle la pole a los dominadores del año. En el estrecho y técnico trazado urbano de Marina Bay, donde adelantar es una odisea, asegurarse una buena posición de salida es prácticamente medio triunfo.
El gran damnificado de la jornada fue Lando Norris. El británico, que lucha directamente con su compañero Piastri por el título, solo pudo clasificar quinto, a más de cuatro décimas de Russell y tres de Verstappen. Por delante se coló también el joven Andrea Kimi Antonelli, que completó una brillante sesión con el cuarto mejor registro.
La situación complica aún más el panorama para Norris. A falta de siete Grandes Premios, Piastri lidera el Mundial con 25 puntos de ventaja sobre él y 69 sobre Verstappen. Lando necesitaba recortar distancias y colocar rivales entre ambos McLaren, pero la clasificación dejó el efecto contrario: más presión, más obstáculos y menos margen de error para el aspirante británico.
Con el circuito de Marina Bay preparado para una carrera donde la estrategia y la gestión del neumático serán claves, Russell parte desde la posición ideal para intentar su primer triunfo del año y, de paso, devolver a Mercedes al centro de la escena.
