El piloto británico Lando Norris (McLaren) ha dominado la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Hungría, decimocuarta cita del Mundial de Fórmula 1 y última antes del parón estival, en la que los españoles Fernando Alonso (Aston Martin), ausente en la primera sesión por su lesión de espalda, y Carlos Sainz (Williams) terminaron quinto y decimosexto, respectivamente, en la tabla de tiempos.
Solo dos coches rodaron por debajo del 1:16 este viernes en Hungaroring, evidenciando su dominio en el campeonato. Norris, que ya mandó por la mañana, concluyó también primero la FP2, con un crono de 1:15.624 con el que superó en dos décimas a su compañero y líder del Mundial, el australiano Oscar Piastri.
El monegasco Charles Leclerc (Ferrari), por su parte, repitió el tercer puesto de la FP1, mientras que al "Top 5" del día ascendieron de manera sorprendente los dos Aston Martin: el canadiense Lance Stroll fue cuarto a cerca de cinco décimas de Norris, y Alonso finalizó quinto, a seis.
En la segunda sesión del día, el asturiano salió a pista tras reservarse durante la FP1, cuando el brasileño Felipe Drugovich le sustituyó en su AMR25. Las molestias por una lesión muscular en la espalda le obligaron a quedarse en el garaje por la mañana, pero por la tarde ya se subió al monoplaza, con medios enfundados de inicio.
En su primer intento, el bicampeón del mundo se quedó a un segundo del mejor tiempo, establecido por Norris, que vio cómo poco después Piastri le arrebataba la posición de privilegio por dos décimas. Sin embargo, solo dos minutos más tarde, el británico reventaba el crono (1:16.525) para regresar a lo más alto, todavía por debajo de la marca de la FP1.
Ya con blandos, el oceánico se aupó al primer lugar a pesar de encontrar tráfico en pista (1:15.915), y su colega de garaje cogió el testigo a continuación para poner su 1:15.624, tres décimas mejor, como referencia. Fuera de la lucha entre los coches "papaya", Verstappen tiraba una toalla desde su "cockpit" y era investigado.
Alonso, por su parte, conseguía auparse al quinto puesto, a una décima de su compañero Lance Stroll, mientras Sainz, hundido en la parte baja de la tabla de tiempos, se veía obligado a volver a boxes por problemas con la telemetría. Las posiciones ya no cambiarían en los minutos finales.
