
El Tribunal de Ética de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) resolvió este miércoles sancionar a Ronald Raldes, expresidente de Oriente Petrolero, y a René Urioste, vicepresidente, con un año de suspensión para ejercer funciones vinculadas al fútbol. Además, de una multa de 500 dólares cada uno, por omisión en el cumplimiento de deberes establecidos en el Código de Ética.
La sanción fue impuesta tras el caso referido como de “conspiración y campaña mediática” en contra del actual presidente de la FBF, Fernando Costa. En el supuesto complot también fueron mencionados Rodrigo Quiroz (dirigente de Bolívar) y Noel Montaño (expresidente de la Asociación Cruceña de Fútbol - ACF), aunque no estos no figuran en la resolución.
Raldes y Urioste ya habían cumplido una suspensión provisional de 120 días, la cual ahora se convierte en definitiva por un periodo de un año, a partir de la notificación formal. Durante este tiempo, no podrán ejercer ningún tipo de función dirigencial, representación institucional o legal ante clubes, asociaciones o instancias de la FBF.
Ahora, Oriente seguirá presidido por Mary Cruz Aguilar y el secretario general Gustavo Gutiérrez. Cabe mencionar, que la presidenta era parte del directorio de Raldes, pero estaba alejada del club por no ser tomada en cuenta en las decisiones.