
Un estudio reciente reveló que seis distritos de Santa Cruz de la Sierra tienen un alto riesgo por la presencia de criaderos del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, zika y chikungunya. Así lo informó la Gobernación de Santa Cruz, a través del Servicio Departamental de Salud (Sedes) y el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop), tras conocerse los resultados de la Encuesta Entomológica 2025.
Según el informe, los distritos 5, 6, 4, 9, 7 y 11 presentan índices de infestación larvaria superiores al 10%. En tanto, los distritos 15, 14, 2, 3, 13 y 10 tienen riesgo medio de sufrir brotes de esas enfermedades por la proliferación del mosquito transmisor. Solo dos distritos, el 1 y el 8, mantienen un bajo riesgo gracias a las labores de control vectorial realizadas durante los últimos meses.
“Hemos visitado 318 unidades vecinales en más de 1.500 barrios y detectamos que casi el 10% de los domicilios inspeccionados tienen criaderos del mosquito Aedes aegypti”, explicó Carlos Hurtado, jefe de la Unidad de Epidemiología del Sedes.
“Esto nos pone en una situación de riesgo inminente de epidemia”, advirtió.
Ante este panorama, el Sedes y el Cenetrop intensificaron las campañas de limpieza y eliminación de criaderos, además de acciones de promoción y prevención.
Las autoridades pidieron a la población abrir las puertas de sus viviendas para permitir las inspecciones y mantener limpios sus patios, destruyendo cualquier envase o recipiente que acumule agua. “Todo lo que pueda contener agua baldes, botellas, llantas debe eliminarse o mantenerse seco”, insistió Hurtado.
También recomendó acudir de inmediato al centro de salud más cercano en caso de presentar síntomas como fiebre alta, dolor de cabeza o molestias musculares.
Los especialistas recordaron que el dengue se caracteriza por fiebre elevada, dolor detrás de los ojos y erupciones cutáneas; la chikungunya provoca intensos dolores articulares que pueden durar semanas; y el zika, aunque con síntomas más leves, representa un riesgo grave para mujeres embarazadas, ya que puede causar malformaciones congénitas como la microcefalia.
La directora del Cenetrop, María Iriarte, destacó que el monitoreo entomológico permite detectar a tiempo las zonas más afectadas y actuar de manera conjunta entre instituciones. “Los resultados que emitimos tienen un alto grado de calidad y son esenciales para la respuesta sanitaria”, señaló.
Este año, entre enero y junio, Santa Cruz enfrentó la peor epidemia de chikungunya de los últimos años, con más de 4.000 casos reportados.
Aunque en las últimas semanas no se registraron nuevos contagios, las autoridades advierten que, con la llegada de las lluvias, el riesgo vuelve a aumentar. “El llamado es claro, eliminar los criaderos y estar atentos a los primeros síntomas. Las lluvias que se aproximan pueden marcar el inicio de una nueva etapa crítica para la salud pública” insistió.