
La UFC y la CSAD (Combat Sports Anti-Doping) oficializaron este martes una sanción de 18 meses de inhabilitación para Conor McGregor, tras incumplir tres controles antidopaje en un periodo de doce meses durante 2024.
Según el comunicado, el irlandés falló las pruebas realizadas el 13 de junio y los días 19 y 20 de septiembre, poco después de sufrir la lesión en el dedo del pie que frustró su esperado combate ante Michael Chandler.
McGregor, de 37 años, aceptó la sanción y colaboró plenamente con las autoridades, lo que permitió reducir el castigo. Así, podrá volver a pelear a partir del 20 de marzo de 2026. De no haber cooperado, la suspensión habría sido de 24 meses, hasta septiembre del mismo año.
En las últimas semanas, “The Notorious” había manifestado su deseo de formar parte de la histórica cartelera que la UFC planea realizar en la Casa Blanca el 14 de junio de 2026. Tras conocerse la sanción, surgieron dudas sobre su participación, aunque el organismo aclaró que el periodo de suspensión se cuenta desde el tercer test fallido, por lo que no corre riesgo su regreso.
A pesar del revés, McGregor ya retomó los entrenamientos y aseguró que dedicará los próximos seis meses exclusivamente a su preparación. Este martes, además, anunció que se alejará temporalmente de las redes sociales, aunque aún no ha emitido una declaración pública sobre la sanción.