
La Comisión de Constitución del Senado aprobó esta semana el proyecto de ley de convocatoria para la elección de los nuevos vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que asumirán en lugar de los actuales cuyo mandato vence a fines de diciembre.
El presidente de la comisión, Luis Adolfo Flores, confirmó que el proyecto fue aprobado el pasado lunes. Agrega que los nuevos vocales deberían estar designados por la Asamblea Plurinacional hasta el 15 o 20 de octubre, tomando en cuenta que en diciembre debe lanzarse la convocatoria para las elecciones subnacionales que deben realizarse en marzo próximo.
El proyecto pasó al pleno de la Cámara Alta y según Flores será considerado en la sesión de este jueves. De ahí debe ser derivada a la Cámara de Diputados. “Esperamos que se elija de manera urgente los mejores hombres y mujeres. Ojalá que no sea como estos vocales actuales, cuya gestión será juzgada por la historia porque no han permitido la participación de muchos candidatos, especialmente encabezado por Evo Morales”, señaló Flores citado por La Razón.
Los actuales vocales son Óscar Hassenteufel, Francisco Vargas, Tahuichi Tahuichi Quispe, Yajaira San Martín, Nelly Arista, Nancy Gutiérrez y Gustavo Ávila. Según la norma seis vocales son designados por el presidente y uno por el presidente del Estado.
Los actuales vocales asumieron el 19 de diciembre del 2019. Salvador Romero fue nombrado por Jeanine Añez, pero renunció tras las elecciones del 2020. Entonces, Luis Arce nombró a Dina Chuquimia y luego de manera sorpresiva designó en su lugar a Gustavo Ávila.
Inicialmente fueron posesionadas como titulares María Angélica Ruiz Vaca y Rosario Baptista Canedo, pero presentaron su renuncia y en su lugar asumieron San Martín y Nelly Arista.
La actual gestión de la ALP, con mayoría del MAS aunque dividido en tres facciones concluye el 8 de noviembre tendrá en sus manos la renovación del TSE cuyo mandato es de seis años. La reconfiguración del árbitro electoral sucederá en plena campaña para la segunda vuelta y con los resultados de la primera vuelta ya definidos con una reconfiguración total del parlamento donde el MAS prácticamente ha desaparecido.