Mientras el presidente Evo Morales defiende la práctica de campesinos que chaquean para ampliar sus zonas de cultivo y, además, asegura que esa conducta no causa el fuego que afecta al país, las reservas nacionales protegidas y colonizadas registran focos de calor por los desmontes y quemas que buscan producción agrícola en esas tierras.
En un solo día, 316 focos de calor 89 se registran dentro de áreas protegidas nacionales y departamentales, informó a El Día el director de Medio Ambiente de la Gobernación, el ingeniero forestal Eber Menacho. El parque Amni Otuquis, área protegida nacional tuvo 66 focos de calor sólo durante el 24 de agosto, detalló la fuente.
“En San Ignacio de Velasco, en el límite con el Beni hay una serie de asentamientos de sindicatos agropecuarios que chaquean y desmontan, incluso cerca del parque Noel Kempff Mercado, camino a Piso firme”, señaló Menacho.
Fundamentada en esos ejemplos, la autoridad departamental señala que la migración campesina del interior hacia el oriente, pero también oriundos de esta región avanzan sobre las reservas naturales del país, lo cual ya es ilegal y, sobre ello, abusan de la naturaleza con el fomento de los focos de calor con fines agrícolas en una zona en que esa actividad está prohibida. Sólo la reserva forestal El Chore que originalmente tuvo 900 mil hectáreas ahora tiene 200 mil, producto de los avasallamientos que no son impedidos por una política nacional o, incluso, tácitamente fomentados con la omisión del problema, opina el especialista.
Asimismo, explica que hay un reglamento de chaqueo controlado que tiene vacíos. Los productores realizan sus quemas sin el permiso respectivo, lo cual impide que la ABT -Autoridad Boliviana de Fiscalización de Bosques y Tierras- cumpla un seguimiento necesario y una programación. “Las quemas se deben programar según el pronóstico del tiempo de modo que no se junten todas con el impacto que estamos sintiendo actualmente”.
“Hay vacíos en algunos artículos en cuanto a la autorización de quema de pastizales. Por ejemplo, se autoriza al agricultor su plan de desmonte y con eso se cree que va a suceder todo en regla; sin embargo, no hay control antes de realizar la quema, durante y después. Falta un seguimiento”, explica.
El comunario no prevé las recomendaciones de la norma existente de no quemar cuando hay vientos fuertes; tampoco al mediodía, sino a primera hora de la mañana o al finalizar la tarde cuando el viento disminuye. Y, sobre todo, hacer callejones cortafuego -cinco metro limpiados al ras, en todo el contorno del suelo que se va a quemar, a manera de contención-, una medida imprescindible porque evita que la quema se expanda a la propiedad de su vecino.
Apoyo internacional y consecuencias de la contaminación
Llegará ayuda argentina • El gobierno argentino enviará ayuda a Bolivia para el combate de incendios por la quema de pastizales para la siembra que afectó a unos 2 millones de hectáreas, informó ayer la Cancillería. El gobierno argentino dispuso enviar a un grupo de expertos de la Comisión de Cascos Blancos de la Cancillería y del Plan Nacional de Manejo sustentable del Fuego de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable para evaluar in situ las necesidades específicas / AFP
La humareda incrementa los IRAs • La Unidad de Epidemiología del Ministerio de Salud, informó que en los departamentos de Pando y Beni se incrementaron los casos por Infecciones Respiratorias Agudas (IRAs), no causado por algún virus en el cuerpo del paciente, sino son efecto de la inhalación del humo producto de los chaqueos / ABI