El rey Josías en nuestros días

Pisando callos

| | 2015-08-26

Josías (en hebreo “Jehová me apoya”) fue un Rey de Judá, conocido por sus reformas legales. Josías subió al trono a los 8 años, y gobernó por unos 30 más o menos, entre 640 y 610 a. C., aconsejado por el profeta Jeremías. El Reino estaba amenazado por los asirios, los babilonios, y los egipcios; pero Josías recuperó y restableció las antiguas leyes de Israel, dadas por Dios a través de Moisés.

Y no fue un déspota. Dice la Biblia que ”...mandó reunir a todos los ancianos de Judá y de Jerusalén. Y subió el rey a la casa de Jehová con todos los varones de Judá, y con todos los moradores de Jerusalén, con todos los sacerdotes y profetas y con todo el pueblo, desde el más chico hasta el más grande; y les leyó, oyéndolo ellos, todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová. Y poniéndose el rey en pie junto a la columna, hizo pacto delante de Jehová, de que irían en pos de Jehová, y guardarían sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo el corazón y con toda el alma, y que cumplirían las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro. Y todo el pueblo confirmó el pacto.” II Reyes 23:1-3. Son hechos históricos.

Casi todos los estudiosos bíblicos son gente muy religiosa, y dicen que las de Josías fueron reformas religiosas. Pero no es así, al menos no enteramente, porque: (1) Josías era el Rey, no el Sumo Sacerdote. (2) El “libro del pacto” no es solo religioso. Los 613 “mandamientos, testimonios y estatutos”, que pueden leerse en Éxodo, Levítico y Números, y se resumen en Deuteronomio, no tratan solo de religión: muchas de estas normativas son de orden constitucional, civil comercial, penal y procesal. Así que las “Reformas de Josías” excedieron largamente la esfera de la religión.

¿Cómo sería hoy un proceso de restauración, por ejemplo en Perú, en un Gobierno liberal clásico, con mayoría suficiente de congresistas? Como en unos cuatro pasos, tres de ellos inmediatos, y el cuarto a mediano plazo:

(I) Referéndum nacional patriótico para cambiar el sistema. La pregunta es: ¿Estás de acuerdo con ‘La Gran Devolución’ para los peruanos o no?” El texto de la papeleta de votación informa que es un cambio en el sistema de Gobierno, pasando del actual estatismo social-mercantilista, al liberalismo clásico, con sus tres pilares: Gobiernos limitados, mercados libres y propiedad privada, rescatando la soberanía nacional mediante la denuncia de ciertos tratados internacionales, y devolviendo al pueblo todas las funciones, poderes y recursos usurpados por el estatismo.

Y que es mediante dos políticas: (1) derogar las leyes del sistema actual, las leyes malas, cuando sean incorregibles, y reformar las que sean corregibles, incluyendo artículos de la Constitución, en tanto impiden o estorban las Cinco Reformas; (2) impulsar el Plan de las Cinco Reformas: (i) en la política, (ii) economía, (iii) educación, (iv) atención médica, y (v) jubilaciones y pensiones. Se incluye en la papeleta una breve indicación de las tales leyes, y de los tratados a denunciar, con un resumen de las reformas.

(II) Ley general para cambiar las leyes y disposiciones constitucionales. Aprobado el Referéndum por el pueblo, ya con claro mandato en favor de “La Gran Devolución”, el Gobierno pasa al Congreso el Proyecto de Ley para derogar las leyes malas incorregibles, y reformar las corregibles, incluso artículos de la Constitución, y para denunciar tratados y abandonar organismos internacionales.

El texto enumera cuáles son las leyes y normas que van a derogarse por completo, y cuáles a ser reformadas, especificando los cambios, y cuáles tratados y organismos internacionales. Y declara que en toda aquella normativa que sea derogada, van a recuperar su vigencia los antiguos Códigos Civil, Comercial, Penal y de Procedimientos.

(III) Restitución de la soberanía nacional en el Perú, y apertura al comercio e intercambios pacíficos con todo el mundo. Es la formal y solemne denuncia de los tratados y acuerdos con las agencias del “Sistema de las Naciones Unidas” que nos imponen las leyes malas a los peruanos, y que nos impiden hacer reformas liberales, una vez aprobada la ley anterior por el Congreso. E inmediato retiro del Perú de todos estos organismos, tanto mundiales como regionales.

Y apertura del país al comercio e intercambios pacíficos con el exterior, para fines de inversiones y actividades productivas, trabajo, educación y cultura, deporte, turismo, etc., con libre circulación de personas, empresas y bienes, en las condiciones del nuevo sistema liberal clásico de Gobierno.

Hasta aquí todo podría hacerse en el primer año de Gobierno.

(IV) Aplicación y puesta en marcha de la serie de Cinco Reformas. No. 1 de la política: del Estado en sus tres poderes, de los Gobiernos en sus tres niveles, las elecciones y los partidos; No. 2 de la economía: la moneda, banca y finanzas, el agro, industria, comercio y servicios; No. 3 de la educación, en todos sus niveles; No. 4 de la atención médica; y No. 5 de las jubilaciones y pensiones.

Este proceso de cambio tomaría unos 4 o 5 años aproximadamente, ya que cada una de las Cinco Reformas es realmente un paquete o conjunto de reformas, para cada una de las áreas referidas.
¿Ves que no es tan complicado?