El expresidente del Senado, José Alberto Gonzales, juró ayer como representante de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y, como una de sus tareas, planteó que buscará devolverle el "brillo" al ente continental, que a su criterio ha tenido un bajón.
La OEA ha sido protagonista de polémicas en los últimos años por su división ante la situación de Venezuela y Nicaragua, además de la posición de su secretario general, Luis Almagro, de censurar a los gobiernos de esos países. En ese contexto, el Gobierno boliviano se ha puesto del lado de Nicolás Maduro y Daniel Ortega. /Erbol