Decenas de miles de militares surcoreanos y estadounidenses iniciaron ayer maniobras que simulan un ataque norcoreano, y Pyongyang replicó con amenazas de bombardeo nuclear preventivo.
Estas maniobras anuales, bautizadas Ulchi Freedom, son esencialmente una simulación en ordenador pero movilizan a 50.000 surcoreanos y 30.000 estadounidenses.
Todos los años, provocan un aumento de tensión en la península, y más este año, en un momento de fuerte crispación intercoreana.
Las relaciones intercoreanas no han estado tan mal desde los años setenta por el lanzamiento de misiles. / AFP