Según un comunicado del Arzobispado de Santa Cruz, el religioso fue sometido a una transfusión de sangre y en este momento su situación es estable.
El Cardenal, padece diabetes y cardiopatía, hecho que requiere mayores cuidados, por lo que los médicos consideraron oportuno que permanezca en observación en terapia intensiva, indicó la fuente.
El vocero religioso Erwin Bazán precisó que los médicos estiman que el Cardenal pase de terapia intensiva a terapia normal el día de mañana.
Bazán pidió a la comunidad católica a elevar una oración para pronta recuperación del Cardenal Julio.