La lucha por el precio de los pasajes de transporte público se mantiene entre los choferes y la Alcaldía paceña. Después de que los conductores amenazaran con una subida arbitraria del precio de los pasajes en 50 centavos desde el 1 de enero, la Comuna instauró un operativo policial para evitar la subida unilateral de precios.
Varios agentes se ubicaron en cuatro sectores de la ciudad para advertir por megafonía a los usuarios que la subida del pasaje no ha sido autorizada por el Municipio y que no deben tolerarla. El secretario municipal de Movilidad, Ramiro Burgos, anunció que desde mañana serán 10 los puntos de control y el despliegue policial involucrará a 60 agentes.
Piden los resultados de un estudio de factibilidad. "Tenemos puntos definidos en el estadio Hernando Siles, el hospital Obrero, la Pérez Velasco, La Portada, la plaza Garita de Lima y en varios lugares vamos a ir rotando con los efectivos que tenemos este fin de semana", explicó Burgos durante un operativo realizado en la plaza Camacho.
Los conductores sindicalizados de las federaciones Primero de Mayo y de Choferes Urbanos amenazaron con implementar de facto una tarifa de Bs 0,50 más desde el 1 de enero hasta que la Alcaldía no les transmita los resultados del estudio que encargó a una empresa consultora y donde presuntamente se establecería la necesidad de un incremento del precio de los pasajes, según ellos.
"El alcalde está generando susceptibilidad y desesperación en el compañero transportista", declaró recientemente el ejecutivo de la Federación Departamental de Transportes Primero de Mayo, Rubén Sánchez.
Exigen a los choferes asumir los compromisos. Burgos reiteró que no cederán a las presiones de los conductores y no publicarán los datos de la consultoría hasta que los choferes no cumplan con los compromisos asumidos; es decir, el registro de sindicatos y vehículos y la mejora de la calidad del servicio.