Brasil inició ayer una vasta operación de combate al crimen en sus 4.045 kilómetros de fronteras con Bolivia y Paraguay, que prevé la movilización de 4.200 militares, informaron fuentes oficiales.
Se trata de la novena edición de la llamada Operación Ágata, una movilización anual de combate al crimen transfronterizo y que el año pasado, como medida de seguridad previa al Mundial de fútbol Brasil 2014, se extendió a los 16.886 kilómetros de extensión de todas las fronteras terrestres del país.
Vigilancia y fiscalización. En la edición de este año, las operaciones de vigilancia y fiscalización se limitarán a los 166 municipios de los estados de Paraná, Mato Grosso do Sul, Mato Grosso y Rondonia que están próximos a las fronteras con Bolivia y Paraguay, según un comunicado del Ministerio de Defensa.
La operación será dirigida desde la sede del Comando Militar del Oeste (CMO) del Ejército en la ciudad de Campo Grande y tendrá como uno de sus focos la ciudad de Foz do Iguaçu, en la triple frontera con Argentina y Paraguay y una de las principales puertas de entrada del contrabando a Brasil.
46 organismos públicos. Además de los 4.200 militares del Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, bajo el comando del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, la operación movilizará a 4.201 fiscales y funcionarios de 46 diferentes organismos públicos como la Aduana, las policías regionales, la Administración Federal de Impuestos y las diferentes agencias reguladoras del país.