El Real Madrid protagonizó una noche amarga en el Santiago Bernabéu al caer 0-2 frente al Celta de Vigo, en un partido que se descontroló en la segunda mitad y dejó al equipo de Xabi Alonso con dos expulsados, varias amonestaciones y un duro golpe en la lucha por el liderato.
La primera mala noticia llegó temprano. Éder Militao se lesionó a los 21 minutos al intentar frenar a Pablo Durán y pidió el cambio inmediatamente, llevándose la mano al muslo izquierdo. Antonio Rüdiger ingresó para sostener una defensa ya plagada de bajas.
Tras un primer tiempo cerrado, el Celta aprovechó su ocasión más clara. Williot Swedberg, que había entrado en el descanso, abrió el marcador al minuto 53 con un espectacular remate de “taquito” dentro del área tras pase de Bryan Zaragoza, dejando sin reacción a la zaga merengue.
El panorama empeoró para el Madrid con la expulsión de Fran García en el 64’. El lateral recibió dos amarillas consecutivas por juego peligroso y dejó a su equipo con diez. Aun así, los blancos intentaron reaccionar con Mbappé, Vinícius y Rodrygo, pero les faltó precisión ante un sólido Ionut Radu.
La tensión creció con el paso de los minutos. Jude Bellingham fue amonestado por protestar, y en el descuento Rodrygo, Valverde y Álvaro Carreras también vieron tarjeta. Este último pasó de amarilla a roja entre el 90+1’ y el 90+2’, dejando al Madrid con nueve jugadores en el cierre del partido.
Con el local desbordado, el Celta sentenció el duelo en el 90+3’. Otra vez Swedberg apareció en el área para empujar el 0-2 y firmar un doblete histórico para el cuadro gallego. La derrota deja al Real Madrid a cuatro puntos del líder Barcelona y, además, golpeado anímicamente antes de recibir al Manchester City este miércoles por la Champions.
/El Día - Reuters
