
La nadadora boliviana María José Ribera anunció este lunes el cierre de uno de los capítulos más difíciles de su carrera deportiva, luego de que la investigación oficial determinara que el resultado positivo que registró en un control antidopaje, publicado en agosto del pasado año, se debió a la contaminación involuntaria de un suplemento.
Según explicó en un comunicado en Instagram, la resolución confirma que nunca consumió de manera voluntaria la sustancia prohibida y que esta fue añadida sin su conocimiento en un producto nutricional que formaba parte de su rutina deportiva.
Ribera relató que los últimos meses estuvieron marcados por “angustia, dudas, audiencias y la necesidad de defender una y otra vez la verdad”, calificando la experiencia como una de las pruebas más duras de su vida.
Asimismo, dedicó un mensaje de agradecimiento a su familia, amigos, cuerpo técnico, empresas que la respaldan y a todas las personas que le enviaron apoyo durante el proceso. “Ustedes me sostuvieron cuando la incertidumbre pesaba más que todo. Gracias por creer en mi palabra cuando era lo único que tenía”, escribió.
La nadadora aseguró que esta etapa concluye y que retoma su carrera “más fuerte, más consciente y con la misma pasión de siempre”, reafirmando su compromiso deportivo tras superar uno de los momentos más complejos de su trayectoria.