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Revindicando la autoría de un poema en chiquitano

Revindicando la autoría de un poema en chiquitano
Oswaldo Ramos Astibena | Columnista
| 2025-10-29 07:23:00

Grande fue mi sorpresa cuando, al conversar con el periodista Winston Coímbra sobre “Un poema en chiquitano”, de El Camba Florencio, él señala que existe un error que crece, porque nadie lo aclara, y muchos en radios y la tele, lo fomentan, sin especificar que El Camba no fue el autor, sino el profesor Raúl Landívar Justiniano, de San Ignacio de Velasco.

¿Qué y cómo ocurrió esto?, fue mi pregunta. Porque en la Internet y otros medios figura Discurso chiquitano, pero no se lo menciona a Raúl.

Pedí más datos. Winston conversó con Raúl, y ambos decidimos reivindicar la historia.

Fue así:

En 1982, delegado por el entonces Vicariato Apostólico de Chiquitos con sede en la capital de Velasco, Landívar viajó a la ciudad de La Paz para participar como representante chiquitano del Primer Encuentro Indígena de Pueblos Amazónicos - Andinos, financiados por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Conferencia Episcopal Boliviana y las radiodifusoras católicas Fides y San Gabriel.

Allí, durante una cena previa al encuentro, Landívar se enteró que cada delegado, en el acto central del día siguiente, debía pronunciar un discurso en el idioma de la etnia o pueblo Indígena al que representaba.

Raúl Landívar Justiniano, apenas sabía saludar y decir gracias en chiquitano, así que estaba en tremendo apuro.

Esa noche caviló cómo salir del paso y fue cuando, entre cavilaciones de cómo vencer la difícil situación, sobrevino la inspiración y nació “Un poema en chiquitano”.

Pasó un lustro, el poema quedó entre tantos otros y letras de canciones e himnos escritos por Raúl.

El año 1987, siendo docente del Colegio Seminario San Ignacio, le dio como tarea a su alumno Luzardo Gutiérrez, que memorizara el poema, al que ya le había puesto unos versos de introducción, en sentido que se trataba de un gran congreso de naciones, aunque en realidad se refería al encuentro indígena ya mencionado.

Luzardo Gutierrez tenía como vecino a un nieto del Camba Florencio, cuyo padre trabajaba en la sucursal de la Cooperativa San Martín de Porres en San Ignacio de Velasco. Lizardo le pidió a su amigo y vecino, al nieto de Florencio, que le ayude, tomándole examen de cómo estaba memorizando el poema.

De tanto repasar y repetir el poema, el nieto de El Camba Florencio, también lo memorizó y, cuando volvió a su natal Montero, se lo recitó a su abuelo.

El poema le encantó y el Camba Florencio lo llevó al disco, con gran impacto por su cualidad de declamador, igual que los poemas “Las vistas” y “Vámonos para Porongo”, de Germán Coímbra Sanz. Pero cómo él los declamaba, todos, yo entre muchos, no pensamos en el autor, sino en el declamador.

Esa es la síntesis de la historia

Raúl Landívar Justiniano, muy conocido en San Ignacio por su sobrenombre Famín, es muy creativo. Ha escrito libros sobre la cultura chiquitana, obras de teatro costumbrista, poemas, letras de canciones, chovenas y taquiraris, himnos oficiales para nueve establecimientos educativos, decenas de bandos carnavaleros y versos para coronaciones de reinas de todo tipo.

Como referencia, éstas son algunas de sus obras literarias: Cronología de San Ignacio de Velasco, Diccionario popular chiquitano, Danzas folclóricas de la provincia Velasco, Danzas folclóricas de las diez misiones jesuíticas, Cuentos y leyendas chiquitanas, Ecos de mi tierra (5 tomos,)

Y en poesías: Cristo Camba (fue distinguido en el Festival del colegio San Calixto de Cochabamba el 2003), Poesía Camba y Paica, Espíritu de leyenda y cultura y el tema que nos ocupa: Un poema en chiquitano.

En teatro costumbrista escribió: Camba, pero no tan tan, Las casamenteras y La marimacho

Entre himnos compuso para el Colegio Seminario, Granja Hogar, al pueblo Piso Firme y al Colegio Rosehammer,

Y entre las canciones figuran: Chovena San Miguel, Chovena Sañonama y Chovena Tamanti Chovena, escritas para el Primer Festival de la Chovena, realizado en San Miguel de Velasco y que fueron cantadas y llevadas al disco por Aldo Peña.

Eso en líneas generales.

Oswaldo Ramos Astibena | Columnista