Novak Djokovic, a sus 38 años, sigue agrandando su leyenda. Este miércoles se clasificó por 13ª vez a las semifinales de Roland Garros tras vencer a Alexander Zverev por 4-6, 6-3, 6-2 y 6-4, sumando su victoria número 101 en el Abierto de Francia.
El serbio, que llegó a París sin triunfos en la gira europea de arcilla, ya acumula nueve victorias y se perfila como un serio candidato al título, a pesar de las dudas que lo rodeaban hace apenas tres semanas.
Zverev, número 3 del mundo, comenzó firme y se llevó el primer set gracias a un quiebre en el juego inicial. Sin embargo, Djokovic reaccionó con fuerza: tomó ventaja en el segundo parcial, sostuvo su servicio con solidez y desde allí dominó el encuentro. Con precisión desde el fondo de la cancha y temple en los momentos clave, el número 1 mundial impuso su experiencia.
Uno de los puntos del torneo llegó en el cuarto set, cuando, con el marcador 3-2 y bola de break para Zverev, Djokovic ganó un intercambio de 41 golpes con un brillante passing de derecha, inclinando definitivamente el duelo a su favor.
La derrota deja a Zverev fuera de la final que disputó el año pasado, lo que le costará 900 puntos en el ranking. Para Djokovic, en cambio, significa una nueva marca: su semifinal número 51 en Grand Slams, en 78 participaciones.
El próximo reto será ante Jannik Sinner, el único semifinalista que aún no ha cedido sets en el torneo. El italiano, sin embargo, deberá estar atento: Djokovic sigue demostrando que no hay edad ni frío que frene su ambición. El duelo se jugará este viernes en horario a definir.
