Un suboficial de las Fuerzas Armadas, identificado como Bismar G. I., fue aprehendido en las últimas horas en el marco de la investigación por el asesinato del teniente coronel Juan Javier Soliz Cáceres, comandante del Regimiento Manchego - Satinadores de la Selva, con base en el municipio de Montero.
La detención fue confirmada por el viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, quien informó que el aprehendido ocupaba un “cargo importante” dentro del recinto militar y que su aprehensión se dio tras identificar varias incongruencias en su declaración.
El crimen ocurrió la noche del 30 de mayo, aproximadamente a las 23:30, dentro del recinto militar, cerca del domicilio del coronel Soliz. La víctima fue abatida con un disparo de arma de fuego que le provocó un orificio de entrada y salida. Según las primeras pesquisas, un individuo se internó en sembradíos de caña de azúcar colindantes con el regimiento tras el hecho.
Durante un allanamiento en la habitación del aprehendido se encontraron armas de fuego que no estaban autorizadas para su posesión. Aguilera indicó que además se encontró una suma de dinero, cuya cantidad no precisó, escondida en el colchón del militar.
Aguilera explicó que una de las hipótesis que se maneja apunta a un posible móvil económico, aunque aún se esperan los informes de entidades financieras para confirmar o descartar esta posibilidad.
El móvil económico toma fuerza tras conocerse que el suboficial aprehendido habría tenido una fuerte discusión con el coronel Soliz, luego del pago del bono de la Renta Dignidad, por recursos cuya rendición no se habría realizado de forma adecuada.
“Evidentemente, se ha encontrado una suma de dinero en su colchón, la cual debería haber estado en una de las dos cajas fuertes que tenía el regimiento”, afirmó Aguilera, quien anticipó que dará un informe del avance del caso en horas de la noche.
El fiscal general del Estado, Roger Mariaca, aclaró que el suboficial detenido no sería el autor directo del homicidio, pero sí estaría vinculado al hecho mediante acciones de encubrimiento y por haber estado en posesión de armamento de manera irregular.
Además, se reportó la aparición de una carta con un mensaje considerado como un intento de distorsionar la investigación, la cual fue hallada en la vivienda del coronel asesinado. Las autoridades identificaron a otra persona, también funcionario militar, como responsable de la redacción del documento.
Según Mariaca, en las próximas horas se emitirán nuevas órdenes de aprehensión contra otros posibles implicados.
