A pocas horas del corso cruceño, el ambiente festivo se siente en cada rincón de la ciudad. Los comerciantes despliegan sus mejores ofertas en casacas, chisguetes, espumas y disfraces, mientras que las terminales de buses se ven abarrotadas de viajeros que se dirigen a municipios vecinos para celebrar la fiesta grande con tradiciones locales.
En mercados como el nuevo La Ramada y en las serigrafías de la calle Mercado, la venta de casacas personalizadas ha aumentado sustancialmente. Este año, los diseños reflejan temáticas de protesta y creatividad carnavalesca.
“Desde el miércoles notamos un alza en la demanda, sobre todo de quienes celebrarán en familia”, señaló Melvi Antelo, vendedora.
Los precios de las casacas arrancan en Bs 50 y pueden subir según el diseño.
Las tiendas de disfraces también han visto un repunte en la clientela, con pedidos que provienen tanto de la ciudad como de comparsas de provincias.
Los disfraces de reinas y trajes típicos como el tipoy oscilan entre Bs 150 y Bs 200.
Los chisguetes se imponen como uno de los artículos más vendidos, con precios desde Bs 5 hasta Bs 20 en modelos infantiles con diseños de personajes populares.
Las espumas también han llegado a los anaqueles a Bs 8 la unidad y Bs 105 el paquete.
Los comerciantes también ofrecen globos, serpentinas y antifaces a precios accesibles: tres bolsas de globos por Bs 10, serpentinas a Bs 2 y pañoletas a Bs 5. El corso cruceño se realizará este sábado a partir de las 17:00 y después vienen los tres días de jolgorio y mojazón.
