El secretario de Estado de EEUU, Anthony Blinken, ha asegurado hoy que su país "no está implicado en operaciones ofensivas", en relación con las explosiones registradas esta madrugada en Irán, tras concluir el G7 de Exteriores en Capri, que abogó por una desescalada de las tensiones en Oriente Medio. De esta forma, la comunidad internacional pide tanto a Israel como a Irán "contención" para evitar que haya una escalada del conflicto en Oriente Medio.
En la madrugada del viernes, Irán activó las alarmas antiaéreas debido a un ataque "limitado" israelí con drones que apuntó contra varias ciudades y localizaciones de infraestructura militar iraníes. El movimiento de Tel Aviv, esperado aunque no por ello menos temido, hunde más a la región en una espiral hacia la guerra total.
A lo largo de la mañana, tanto medios iraníes como autoridades del país, han insistido en que hay una situación de normalidad y de "calma" tras escuchar las explosiones de madrugada.
Este ataque se produce como consecuencia del que realizaron las fuerzas iraníes el pasado sábado, cuando atacaron territorio israelí como respuesta a un ataque a su consulado en Damasco (Siria), el cual atribuyen a Israel, en el que murieron 7 miembros de la Guardia Revolucionaria iraní.
Por otra parte, la Unión Europea ha adoptado este viernes sanciones contra cuatro colonos radicales y dos grupos supremacistas judíos responsables de disturbios y ataques en Cisjordania, siguiendo el acuerdo para responder a la crisis en Oriente Medio con sanciones contra Hamás y contra colonos por poner en jaque la solución de dos Estados.
